La Confederación General del Trabajo -CGT- fue fundada en 1971 en Medellín por una facción disidente de la Unión de Trabajadores de Colombia -UTC, central sindical de origen cristiano fundada en la misma ciudad en 1946. Originalmente hicieron parte de la CGT 28 mil trabajadores afiliados a sindicatos muy importantes de la época como la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos -ANUC, la Federación Nacional de Trabajadores del Estado -FENALTRASE, el sindicato del seguro social y el de la Universidad Nacional, entre otros. En su ideario fundacional se establece:
“Su compromiso revolucionario y su lucha por el desarrollo del trabajador y su promoción personal y colectiva, la búsqueda de una nueva sociedad no sujeta a la explotación social y a la represión de las libertades; reivindica un socialismo no alineado, ni prosoviético ni prochino; un sindicalismo no vinculado u orientado por un partido político; con una posición latinoamericanista y de rechazo a cualquier tipo de dominación imperialista.”
Esta declaración de principios muestra claramente la influencia que tenía la guerra fría en el escenario político de los países de América Latina por aquellos años. También muestra un esfuerzo por lograr independencia y autonomía frente a la incidencia que los partidos, liberal y conservador, pero también ante la influencia del comunismo internacional, en un contexto en el que la aparición de las guerrillas comunistas polarizaba enormemente la opinión pública.
En la actualidad la CGT ha desarrollado una política de expansión que le ha permitido consolidarse como la segunda central sindical del país, con presencia en todos los sectores de la economía, con la afiliación de sindicatos tanto públicos como privados. Es sin duda la central sindical mejor posicionada, y el que ha tenido mayores acercamientos con el Estado Colombiano.